Nuestro Movimiento nace producto de la mente preclara de Lord Robert Baden Powell of Gillwell, evolucionando desde sus experiencias con jóvenes al integrarlos en actividades de servicios auxiliares de sus misiones en diversas latitudes del planeta, en su condición de Hombre de Armas. Eso lo llevó a uniformar, a la usanza militar a los jóvenes en tales labores.
Su Educación militar y las características típicas de inicios del siglo XX, unido a las necesidades de la juventud de ese entonces, permitió diseñar un uniforme para ser portado por nuestros miembros, el cual, guardaba cierta distancia del modelo militar, pero consideraba algunos elementos que les gustaba a los Scouts de la época.
Dicho uniforme, tal como lo señala el fundador en Escultismo Para Muchachos, perseguía por si mismo que “La indumentaria Scout, por su uniformidad, constituyera un lazo más de hermandad entre los muchachos de todo el mundo”.
El Uniforme Scout es concebido, por tanto, como una muestra formal de nuestra pertenencia a un movimiento juvenil de nivel mundial, en donde todos portan elementos que le son característicos, sin darle por ello menor importancia a la necesidad educativa de que el mismo sea reflejo del scout, el cual es reconocido por el conglomerado social no solo por su uniforme sino también por su comportamiento moral y ético, además de su actitud de servicio y apoyo solidario al prójimo.
El uniforme, a lo largo de los años, ha evolucionado buscando siempre ser reflejo de lo que los jóvenes solicitan en relación al mismo, pero guardando para ello lógica con los lineamientos mundiales, regionales y nacionales relativos a este punto, así como con la realidad económica que vive cada país.
Igualmente el mismo está pensado para que potencie la práctica del Escultismo en todas las latitudes, por lo cual la rigidez con la cual evaluemos el porte apropiado del uniforme, y los distintos componentes que lo conforman, no puede en ningún momento desentonar con los reales objetivos del Escultismo, el cual no es tener un grupo de jóvenes perfectamente uniformados, sino lograr un comportamiento de excelencia, bajo los parámetros de la sociedad a la cual servimos y nos debemos.
Esta claro que el uniforme es un vehículo por medio del cual nos valemos para la enseñanza de diversos valores importantes del Método Educativo, y la adquisición de normas y rutinas importantes en el desenvolvimiento futuro como ciudadano el cual empieza por la corrección en el porte y la elegancia individual del Scout, como mecanismo para honrar a nuestro Movimiento según lo índico Baden Powell en Escultismo para Muchachos.
Recordemos que lo más importante de ese elemento es el despertar un sentido de pertenencia e igualdad entre todos los que lo portan. Ese sentido de pertenencia se manifiesta a través del comportamiento de todo SCOUT, el cual está claramente definido en nuestra Ley y Promesa Scout.
El objeto de este reglamento es el definir el uniforme que portarán todos los miembros de nuestra asociación, sin distingo de edad, religión, sexo, cargo o condición social aunque considera las características físicas de cada género para adaptar el uniforme a las mismas.
El flexibilizar las pautas aquí indicadas cuando así lo reclamen los intereses de la institución es potestad del Consejo Nacional Scout, el cual debe hacerlo en forma expresa y por escrito, para que no quede duda del correcto proceder de aquellos que utilicen este componente del Método Scout en acción en forma particular.